Los popotes de plástico no alteran el gusto de la bebida, mientras que algunos popotes de papel pueden dejar un ligero sabor desagradable en la boca
Parece que alguien dejó abiertas las puertas del manicomio porque el futuro, como se vislumbraba hace unos meses, ya no tiene piso que lo sostenga. El futuro próximo, especialmente en relación con Estados Unidos, podría estar erosionado por tensiones políticas y económicas.
¿El Nuevo Orden de Trump?
Luego de la avasalladora llegada de Donald Trump a la presidencia de su país y de todos los frentes que ha abierto en unas cuantas semanas contra otros países e instituciones, el futuro se ve borroso.
La nueva administración de Donald Trump ha generado tiranteces diplomáticas y comerciales. Su arribo implica un cambio normativo en el funcionamiento del gobierno estadounidense.
La falta aparente de pesos y contrapesos ha derivado en un poder desmedido en la Casa Blanca, reflejado en un alud de órdenes ejecutivas y en amenazas expansionistas que buscan recuperar el canal de Panamá, comprar Groenlandia e incluso anexar a Canadá.

Ante ello, más lo que se acumule en las próximas fechas, se prevé una incertidumbre económica debido a posibles aranceles (ya entraron en vigor algunas tarifas contra metales como el acero y el aluminio importado a Estados Unidos) y medidas restrictivas en materia migratoria.
¿Hacia dónde va la Industria del Plástico?
En México, la Industria del Plástico de exportación podría verse afectada por estas políticas arancelarias, de entrar en vigor, y por la posible revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) el próximo año.
Por su parte, la Industria del Plástico en Estados Unidos se beneficiará a corto plazo. Donald Trump anunció que firmará un decreto para revertir las medidas de la administración anterior que buscaban eliminar los plásticos de un solo uso en las dependencias federales. Trump promete «volver al plástico» y ha criticado a los popotes de papel como «inservibles».
Fuente: https://ambienteplastico.com/