Manufactura aditiva como proceso productivo: una realidad

Actualmente, el 87 % de las empresas manufactureras líderes del mundo, utilizan la manufactura aditiva en sus procesos. 

En los últimos años la manufactura aditiva ha evolucionado en sus aplicaciones, desde el prototipado, fabricación de herramientas, y ahora con refacciones y piezas finales. Para Sebastián Romo, managing partner de Skala Ventures, es tiempo de que la manufactura aditiva sea vista como un proceso productivo como tal. No va a reemplazar a la inyección de plástico o el maquinado CNC, sino que viene a complementarlos.

Al participar en la primera Demo Week de la Fundación México-Estados Unidos para la Ciencia (Fumec), el especialista aseguró que en la manufactura aditiva es utilizada hoy en día por el 87 % de las empresas de manufactura líderes mundiales en sus industrias.

“Utilizan manufactura aditiva porque le agrega valor a muchas partes de su cadena productiva. No sólo en diseño y prototipado, sino también va agregando valor a todos los elementos que conforman los procesos productivos, desde el diseño hasta la manufactura, y hasta llegar al mercado de los diferentes productos”, aseguró el experto.

La experiencia ha demostrado que la manufactura aditiva es una solución a retos y problemáticas que la industria enfrenta todos los días. En particular, durante la pandemia, ayudó a resolver la falta de suministro de componentes.

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Actualmente en México, se utiliza principalmente para prototipado, sin embargo, en países más avanzados es ya un proceso productivo y se utiliza para la fabricación de piezas de uso final porque ahora tiene diversas aplicaciones, materiales, y tecnologías capaces de resolver cualquier reto de producción.

De hecho, al día de hoy el 90 % de los automóviles integran la manufactura aditiva como parte de su proceso de desarrollo, y según Sebastián Romo, podría llegar hasta 95 o 98 % de los automóviles. Y es que una de la ventajas es el ahorro de costos. Los centros de diseño e ingeniería pueden ahorrar hasta un 80 % de los costos y tiempos de lanzamiento al mercado utilizando la impresión 3D.

Además del prototipado, la impresión de herramientas ha tomado fuerza en el país, aunque también es ya una aplicación probada. Se estima que el 45 % de las impresoras plásticas se utilizan para jigs & fixtures, pues cada vez más empresas compran impresoras 3D específicamente para esto. Les permite mayor ergonomía, mejores costos y más velocidad de adecuación de las herramientas a la línea de producción.

Una de las aplicaciones que ahora está tomando fuerza es la impresión 3D de refacciones por las ventajas que ofrece. Con manufactura aditiva se pueden fabricar refacciones en cualquier momento, en cualquier lugar sin importar la logística y las cadenas de suministro, y sin generar inventarios físicos.

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Con la tecnología actual en equipos de impresión de metales, plásticos, materiales cerámicos y otros, con acabados profesionales, es posible fabricar bajos volúmenes y altas mezclas. Industrias como la aeroespacial, la médica, la fabricación de autos de alta gama, están utilizando la manufactura aditiva para lograr una alta personalización y agregando valor a sus clientes.

Los ejemplos de uso son innumerables, el caso de las partes de turbinas de General Electric es quizá el más conocido. Pero hay otros como el de Bugatti que ha impreso todo el sistema de frenos de un auto y otras partes. En México, la empresa Invisalign es una de las más grandes del mundo con 50 a 70 impresoras 3D para imprimir millones de alineadores dentales al mes, totalmente personalizados para cada uno de sus clientes.

“Tenemos que empezar a considerar la manufactura aditiva como un proceso productivo para hacer piezas de uso final e ir evolucionando (…) y en la parte de manufactura es donde más oportunidades hay. Y dejo una reflexión ¿la impresión 3D es un requisito actual o un tema de valor agregado?”, dijo Sebastián Romo.

Fuente: www.Plastico.com